~Esta chica me está dominando~

    Estos chicos se han dejado llevar, no importaba el momento o el lugar, ellos se deseaban mutuamente y no dejaban escapar ni un segundo en disfrutarse, el 4to día se iba más rápido y su existencia peligraba, esta chica esta temerosa de que él desaparezca sin dar pistas y de perderlo completamente, ella no lo quiere dejar ir y sabe que si llegase a escapar correría tras él, quizás no es propio de una dama, pero a ella no le interesa porque desde que él se posó en su regazo fue suyo. . .

-Yo ya no sé qué hacer, cada vez que la veo algo recorre mi ser y me impide utilizar la razón, no me puedo controlar y solamente me dejo llevar, tocar su cabello, su cuerpo, moldear su figura, besar, soplar, rozar. . . son tantas cosas que simplemente me hacen enloquecer, lo días pasarán y el tiempo se acortará, mi angustia es infinita al solo pensar que debo dejarla, un ser tan menudo e indefenso es capaz de hacer sentir tantas cosas, me asusta, me da un temor enorme el poder que tiene sobre mí, solo soy una creación a base de recuerdos , soy consciente de ello, pero con ella cerca mis pensamientos se vuelven nulos y mis instintos reinan por sobre mi control. . .-Pensaba el chico.

~El desenlace a sido olvidado~

Quedan 4 días. . .

    Cada vez estos adolescentes se dejan llevar más y más, sus dedos hacen el efecto de plumas rozando su piel, pero no son cosquillas las que provocan sino que es como un elixir mágico que les hace llegar a ese punto deseado, ese punto que diferencia a un lecho de rosas con un beso en la mejilla, la chica sabe el desenlace pero ha decidido olvidarlo, ha decidido luchar por ese amor. . .
-Cada vez siento más libertad, sé que esto no podrá durar, sé que esto le causara gran dolor a ella, mi amada, pero no obstante he deseado ser egoísta, es que. . . si tan solo ella supiera como he de sentirme, como siento a mi corazón acelerarse cada vez que estoy entre sus brazos, lo que veo al acariciar su pelo, al mirarla directamente a los ojos y sentirme completamente desnudo cuando ella me observa, pero sencillamente me dejaré llevar por mis sentidos, mis instintos, por mis sentimientos, dejaré de pensar en preguntas estúpidas, disfrutare estos días hasta el último y le dejaré mi recuerdo latente en su corazón, la haré sufrir y de eso me entristezco, pero si esta vez no me arriesgo mi propósito de existencia no llegará a su destino-Piensa el chico de la polera fosforescente.

Esta vez los papeles se han invertido. . .

~Un día menos~

Quedan 5 días. . .

    Cada vez que esta chica podía se escapa del unicornio morado e iba a visitar a su chico, al chico de la polera fosforescente, al encontrarse ambos entrelazaban una mirada cómplice, sonreían con malicia y se devoraban a besos, cada vez sus labios jugaban más apasionadamente bajo el cielo amarillo, las manos del chico bajaban más y más, aplicaba más fuerza, más confianza. . . más pasión, entre sus dulces y apetitosos besos la chica le alborotaba el cabello, lo acariciaba y le peinaba con sus dedos, cuando sus labios se separaban para poder volver a obtener el aliento, en sus miradas se gritaban con un “quiero más”. . .

-Sus manos eran fuertes y cálidas, no podía dejar de pensar en sus caricias, la forma en que me tomaba y me mostraba que sólo él me haría sentir tantas cosas juntas, sus labios eran como nubes de algodón, eran suaves y muy dulces, sus besos eran cada vez más acertados, se deslizaban suavemente por mis mejillas hasta llegar a mi cuello, allí demostraba toda su delicadeza y amor sellándome en un mundo de placer y deseo, no sé hasta dónde podré llegar con mis pensamientos, ya no lo puedo soportar, lo deseo a él y a nadie mas que a él, deseo sus manos, sus ojos, su cabellera, su espalda, su voz, su cuerpo. . . todo, todo lo deseo solo para mis caprichos y uso personal- Pensaba la chica.