-¿A qué le tienes miedo niñita egoísta y caprichosa?, ¿Tus hilos ya no existen?, cambias tan rápido que ya ni sabes cual es tu verdadero yo, lo predecible te asusta y lo impredecible no te da buenos resultados ¿Te deseas arriesgar o huirás como acostumbras?- Preguntó el unicornio morado.
-A la soledad-
-Pero no la combates-
-No consigo que las cosas me salgan bien y me atormento por las cosas mas simples, ya no tengo fuerzas, solo deseo auto-destruirme, deseo terminar con todo y que no me recuerden-
-¿Por qué no quieres ser recordada?-
-Para no sentir el peso de la indiferencia-
El cielo amarillo y el estambre cubrirían su dolor, los teñiría de sangre y se marcharía, la chica no quiere que le tengan pena ni compasión, para ser olvidada tendría que mentir y hacer daño a los que le rodean, así que no es una opción. Vivirá su sufrimiento sola.
No hay comentarios:
Publicar un comentario