~Pinocho, ¿Haz vuelto a mentir?~

    Siento como si mi cuerpo quemara, duele, ¿Dónde estoy?, quizás en lo más profundo de mi ser, quemándome por mis pecados. . . 

-Oh, he pecado, ¿No soy digna del perdón?, quiero salir, duele. . .-

    Quizás he hecho mucho daño, ¿Alguien sufrió?, ¿Alguien lloró?, ¿Fue mi culpa?, no lo sé. . . La verdad me es muy difícil hacer daño, he tenido malos pensamientos como todos los mortales, pero no me gusta hacer sufrir a los demás, quizás por eso estoy sufriendo, por eso duele, porque estoy siendo atacada por lo oscuro de mis pensamientos, esa es mi culpa, mi falta, oh rayos, he pecado.

    Me confieso a quien sea, Buda, Alá, Zeus, Dios, el pulento, a quien quiera escucharme. . . He tenido malos pensamientos, he querido hacer daño, no me ha dejado dormir, he articulado mi plan varias veces, más y más, pero no se ha vuelto más malvado, sino más suave, no entiendo, yo quiero hacerle daño, yo quiero que sufra, que no pueda ser feliz, pero a la vez, no deseo eso, quiero su estabilidad, quiero que viva al máximo y sonría aunque lo este pasando mal, ya que sabrá que estará bien. . . Disfrazo mis razones con amor, siento que haría un acto bueno cuando mis intenciones son realmente malas.

    Oh, he pecado, pero sé que tú estas más al fondo, tu debes de estar ardiendo, consumiéndote, lo sé, lo estas gozando. 

-Joder-

    ¿Qué debería hacer?, quiero darte un empujoncito, darte la oportunidad que te redimas y de paso hacerme sentir plena, aunque... ¿Alcanzaré la plenitud?, ¿Viviré con tu odio?, ¿Soportaré tus palabras?, apostaría por saber, aún no se si lo haré, pero creeme, ganas no me faltan.

    Oh niña traviesa, ¿Porqué haz mentido?, mintiendo no se retiene a la gente, cuando te descubra tendrá mucho que pensar, ¿Debería ayudarlo?.

-Ah, rayos, duele reír-

    Vamos chico, piensa, piensa, ¿Vale la pena?, ¿Realmente no importa?, si no te importa hazla feliz, pero si no puedes con ello, déjala.

Pinocho se ha corrompido...

~Ha vuelto a caer~

    Locura, caos, tiritones, desorden, necesidad, gritos, rasguños, ira, rencor, deseo, lamentos, crueldad, ambición, pereza, risas, impulsividad, llanto, amargura, depresión, sonrisas, burla. . .

    La chica a vuelto a la oscuridad, pero nada es de color, todo es gris, desesperación y tristeza, nadie entiende, todos gritan, corren y corren, se esconden, se retuercen, tapan sus ojos con la intención de que todo vuelva a ser como antes. . . Los habitantes miran desconcertados a la chica, pero ella permanece inmóvil, nada parece estimularle, todo rebota.

-¿Qué ha pasado?, ¿Quién fue?, ¿Porqué todo esta de cabezas?. . . - Todos se preguntan, pero nadie les responde.

    El unicornio morado permanece inmóvil al lado de la pequeña, la mira tristemente y menea la cabeza de un lado a otro, al parecer él la comprende, pero no sabe como salvarla, ella a vuelto a caer y nadie puede sacarla de su perdición. No ha cometido locuras, no se ha hecho daño, ella no ha vuelto a su lugar de fantasías a través de una inconsciencia provocada, ella ahora sólo duerme con sus lágrimas secándose.